Se estaba asomando entre los árboles que se ven desde mi ventana, apenas obscurecía y ya estaba iluminando mi casa, más fuerte que el sol por las mañanas.
Recuerdo que desde chiquita me causaba mucha curiosidad, le preguntaba a mi mamá que cómo podía haber una piedra tan grandota que iluminara tanto... yo creo que mi mamá no se acuerda de mis preguntas, eran demasiado ridículas... creo que muchas ni las dije en voz alta, ya hasta pena me daban... pensaba en lo que muchos decía, que la luna era de queso... y decía repetidas veces, ha de ser un queso delicioso... Y siempre que comía queso fresco pensaba que era parte de la luna y lo comía con mucho gusto, esperando volverme lunática algún día....
Tal vez en cierta forma metafórica lo logré! jajajaja
La luna y yo teníamos conversaciones largas, mi mamá me preguntaba que qué tanto le podía ver a la luna... Me sentaba en el pasillito de afuera de mi casa, colgaba mis pies hasta casi tocar el pasto, nadamás rozarlo y veía la luna, imaginaba que platicábamos sobre la tierra, sobre las estrellas, los mundos, las galaxias, los animales, las plantas...
Al ir creciendo y aprendiendo sobre los fenómenos que produce la luna en la tierra, me interesaba más ir al mar por la noche, ver cómo las olas subían y querían tocar más de la tierra, llenar los espacios secos con agua, gritar en cada ola rompiendo....
Siempre imaginé tocar la luna, una capa áspera que ni podrías tocar con tus propias manos, sino a través de un guante.... jajaja bueeeno, pero para eso tenías que ser astronauta, y para eso tendrían que existir más misiones a la luna...
Por qué ya no van a la luna??? preguntaba a mi mamá y a mis maestros... La luna todavía tiene mucho que ofrecer... por qué no vuelven a ir???
La respuesta general que obtenía era: les sale muy caro y ahora pueden llegar más lejos...
Así fue, llegaron a marte, pero no los humanos... eeeen fin...
La luna está ahí siempre, viéndome y creo que por ella y por la falta de conversaciones lunáticas con ella es la razón por la cual no puedo dormir bien....
Quisiera poder tocarla, saborearla, ver si su tierra es más rica que la tierra de nuestro planeta...
Y sigo soñando con sueños y deseos irrealizables...
Pero de verdad quiero un cachito de la luna! morderlo, olerlo, tocarlo, dormir con ese cachito y despertar llena de sueños lunáticos que se hacen realidad...
2 comments:
La luna... a mí también siempre me dio curiosidad y me gustaba leer cuanta leyenda hubiera al respecto, desde la del Conejo en la Luna de los Aztecas hasta las leyendas japonesas donde dicen que está habitada por una pareja y un tigre :)
A mí también me gusta platicar con la Luna, a solas en mi cuarto, cuando tengo algún problemilla atorado o de plano no tengo con quien hablar jejejej
Las fotos que has tomado de la luna son increíbles, deberían ilustrar este post :)
Saludos y un abrazototototote!!
De chiquito veía las estrellas con mi papá, con ese telescopio pequeñito que tenemos, 45x es poco, pero funciona para ver la luna, nos choreaba de que si veíamos el coche lunar, y nosotros (mi hermano y yo) imaginábamos cómo sería manejar en los cráteres y brincar como pelotas...
Post a Comment