6.10.2008

en estos tiempos de aguas-ceros

La semana pasada, no recuerdo exactamente el día, porque tuve un cierre de semana un poco raro, estaba regresando a mi casa o iendo a algún lugar? jajaja no sé, pero recuerdo lo que pasó dentro del micro.
Llovía algo, no mucho, pero bueeeno, siempre hay que ir preparado, la cosa es que eso de los paraguas siempre es un pequeño desmadrito, que si mojan a los demás, que si no cierran, que si se rompen... Y ese día fue el día del paraguas sangriento, jajajajaja (con voz del cuate que anuncia las películas) bueno, no fue para nada sangriento, no hay que exagerar ana.
Resulta que me subí, y atrás de mí se subió una señora con un paraguotas enorme que estorbaba bastante... Por fin lo logró cerrar y entró al micro, pagó su pasaje y se sentó a un lado mio.
Era una señora viejita, flaquita, canosa, con lentes de fondo de botella, con una mascada en su cuello, y un peinado muy setentero, mucho volumen en esas canas, jajaja. Estaba como preocupada, sosteniendo con fuerza su paraguas, al parecer algún problema tenía el paraguas... mmmm dije, no no no, sólo me falta que se abra y pum y dicho y hecho, en cuanto lo pensé se abrió su paraguas, arrojando gotitas directamente hacia mi, dando un pequeño raspón en mis piernas. La señora muerta de la pena intentó cerrarlo nuevamente... pero entre el espacio reducido y su poca fuerza le era imposible. Le dije, yo le ayudo señora. Pero uuuuy no, puso cara de malhumorada y me dijo, "por supuesto que NO, mi paraguas es muy caro e importante como para prestárselo a nadie, olvídalo niñita, ahora te aguantas y lo dejaré abierto hasta salir."
El chofer vio que la señora traía su paraguas abierto, de verdad era grande, digamos que alcanzaba a taparla a ella a mi y ocupaba la mitad del corredor del micro. Obvio que el chofer se enojó. "Señora cierre su paraguas, adentro no llueve, no sea loca". La señora refunfuñaba, mostraba los dientes cual perro rabioso, pero eran dientes postizos y yo imaginaba sus dientes postizos salíendose en un enfrenón del micro y comencé a reir... No le agradó mi risa a la señora, entonces intentó nuevamente cerrar su paraguas, pero esta vez cerrándolo casi en mi cabeza, era parte de su forma de molestarme, y a mi me daba más risa, finalmente le dije, "señora, voy a bajar, yo le ofrecía ayuda con su paraguas, pero sino la quiere es su problema."
Justo en ese momento sentí algo que caía en mi cabeza, goteras en el micro!!!! no es de extrañarse, pero pues ahora tenía sentido el paraguas de la señora. Salí con cuidado, procurando no rozar el paraguas de la señora que cada vez estaba más molesta. El chofer seguía gritando que cerrara su paraguas, y la señora gritó "para qué inutil, si tu pesero tiene goteras???!!!"
Toqué el timbre y bajé, ahh que con el agua y los paraguas, pero sobretodo con la gente loca!!!
Seguramente me sucederán más cosas en estos días lluviosos y de locura frecuente.

6 comments:

dèbora hadaza said...

"para qué inutil, si tu pesero tiene goteras???!!!"


jajaja

Verónica said...

Que mujer para grosera y loca! Espero que a la final no te hayas mojado mucho!
Saludos!

Andrés said...

wow, yo me hubiera quedado para ver que pasaba

Megara said...

jajaja...quê cagado!! para mi que la sra era bruja jajaja

Manolo said...

jejeje.. que bueno que no cerró el paraguas, si no hubiera dado de paraguazos al chof.. e igual ya ti te tocaba, luego salían volando los dientes dando mordiditas en el charco del pesero jejeje
besos

Anonymous said...

quiero lluvia
locura
y locos
ya tengo muchos

quiero quiero quiero lluvia
y empiezo a resignarme a que
tu
no
vie
nes

fea